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MANTENIMIENTO PREVENTIVO: Mejora la eficiencia de tu colector


Un colector de polvo de gran calidad y que se haya diseñado e instalado correctamente para una aplicación específica, debe brindar la tranquilidad de saber que el aire de tus instalaciones es seguro para respirar. Además, debe ofrecer un buen rendimiento y sin mayores complicaciones. Sin embargo, esto no significa que las necesidades de servicio durante su vida útil no sean importantes.
El mantenimiento preventivo del colector de polvo ayuda a identificar y prever posibles problemas antes de que se conviertan en problemas más importantes. Aquí te compartimos algunos aspectos cruciales para incluir en tu sistema de colección de polvos y en la inspección de su funcionamiento

1. Supervisión de la presión diferencial

El realizar un seguimiento periodico de las tendencias de la presión diferencial en los filtros para garantizar que la presión se mantenga dentro de los límites establecidos por el fabricante.
Si observas que la presión del sistema ha alcanzado el límite de presión diferencial prescrito por el fabricante, puede ser hora de reemplazar sus filtros. Esto ayuda a garantizar un mantenimiento preventivo oportuno.

2. Inspeccionar el sistema de limpieza del colector de polvo

Revisar el sistema de limpieza por pulsos de los filtros con frecuencia para asegurar que funciona correctamente. Cualquier mal funcionamiento podría indicar un problema con el diafragma y las válvulas de solenoide, las cuales desempeñan un papel crucial en la regulación de los pulsos y garantizan una limpieza eficaz del colector de polvo
En su inspección, asegúrate de verificar los siguientes elementos:
  • Electroválvulas
  • Válvulas de diafragma
  • Configuración y funcionamiento del controlador
  • Configuraciones eléctricas
  • Ajustes de presión de aire
  • Limpieza del regulador del filtro
  • Fugas u obstrucciones en las líneas de aire
  • Presión diferencial numérica
  • Conexiones de aire comprimido
  • Humedad del tanque colector de aire
  • Alineación de la tubería de pulso

3. Inspección de filtros y media filtrante

Recomendamos realizar una inspección exhaustiva de los filtros de cartucho cuando observes un cambio inusual en la caída de presión. Busca signos de desgaste, como desgaste y desgarros, así como una acumulación excesiva de polvo en la media filtrante.
Si detectas una caída de presión que dificulta la eficiencia de captura de polvo del colector, es probable que sea hora de reemplazar los filtros. Aunque algunos filtros de cartucho de larga duración pueden funcionar hasta dos años antes de que sea necesario reemplazarlos, las aplicaciones con gran acumulación de polvo suelen necesitar que los filtros se reemplacen con más frecuencia.

4. Módulos del colector de polvo

Inspeccione la carcasa del colector de polvo anualmente. Nuestros colectores de polvo industriales Gold Series se ensamblan en módulos que se atornillan entre sí. Este diseño modular permite combinar diferentes configuraciones para adaptarse al entorno de trabajo específico.

5. Tolva

La tolva canaliza el polvo a un depósito de almacenamiento. Las tolvas autodescargables permiten eliminar el polvo fácilmente, al mismo tiempo que protegen contra fugas de polvo.
Para vaciar una tolva llena, es necesario separarla de la parte inferior del colector, levantar la tolva en un montacargas, y posteriormente jalar una palanca para abrir la tapa y vaciar el contenido en un contenedor de desecho más grande.

6. Mantenimiento del motor del ventilador

Cuando el ventilador tiene el tamaño y el funcionamiento adecuados, permite que el sistema de extracción logre el flujo de aire y la presión estática o energía necesarios. Si no funciona correctamente, puede hacer que se acumule polvo en los conductos, disminuir la vida útil de los filtros y aumentar los costos de energía eléctrica. Periódicamente revise el consumo de amperaje, vibración excesiva y rendimiento de la banda de transmisión. Revisa también los ventiladores en busca de acumulación de material o corrosión.
Si utiliza un variador de frecuencia (VFD) para controlar eléctricamente la velocidad del ventilador, asegúrese de que funcione correctamente.
Cuando los filtros son nuevos, el variador reduce la velocidad del ventilador para obtener el flujo de aire deseado. Cuando los filtros se cargan de polvo, la unidad acelera el ventilador para mantener constante el flujo de aire.

7. Campanas y ductos

Cuando los ductos de entrada de aire y las campanas funcionan correctamente, capturan las partículas de polvo directamente del origen. Si la velocidad del aire de transporte es demasiado alta, puede dañar el sistema.
El polvo más pesado generalmente requiere velocidades de transporte más altas para permanecer suspendido mientras se mueve a través de los ductos hacia el colector de polvo, sin embargo si la velocidad es demasiado baja, las partículas de polvo se depositan en los ductos y pueden obstruirlos.
Si tus procesos generan polvo combustible, es necesario equipar la ducteria con válvulas de aislamiento que están diseñadas para minimizar los riesgos de deflagración dentro de estos componentes.

8. Mantenimiento de su sistema de recolección de polvo

El mantenimiento regular de tu sistema de colección de polvo de alta eficiencia ayuda a controlar el polvo del proceso y elimina los contaminantes en el aire a largo plazo. Mantener una lista de verificación de mantenimiento del colector de polvo también es una buena idea.
Si tienes alguna pregunta sobre el mantenimiento de tu sistema de colección de polvo, comunícate con nuestros expertos para obtener ayuda.

El mantenimiento preventivo del colector de polvo ayuda a identificar y prever posibles problemas antes de que se conviertan en problemas más importantes.

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